Julio 2021. A las Mascarillas otra vez. Y rápido.
Desde el pasado 26 de Junio, las mascarillas han dejado de ser obligatorias en los espacios al aire libre y con la llegada del verano, las actividades sociales y de ocio nocturno se han disparado, sin que tan siquiera se mantengan las distancias de seguridad.
Por otro lado, ya disponemos de información sobre la variante Delta, identificada por primera vez en la India, que es una de las “variantes preocupantes” designadas por el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). La variante Delta, una cepa de coronavirus más transmisible y posiblemente más peligrosa, ahora representa más de la mitad de todas las nuevas infecciones por Covid-19 en los EE.UU. Se ha convertido en los últimos meses en una de las principales preocupaciones ligadas a la pandemia a causa de su rápida implantación en diferentes territorios de todo el planeta, pues los casos se duplican cada dos semanas. Se ha extendido velozmente por India y Reino Unido. Es prevalente en Francia, Portugal y Alemania, y en Madrid, está en el 44,3 % de los casos detectados, aumentando aceleradamente en Cataluña (60%), Navarra (80%) Andalucía, Castilla León y otras CCAA. En Cantabria, datos indirectos por confirmar, superan un 35%. A finales de agosto, es tanta su velocidad de contagio que posiblemente llegaremos al 90%.
Esta variante Delta del Covid-19 y el aumento en las infecciones entre personas más jóvenes y no vacunadas han catapultado la tasa de coronavirus en España a la más alta de Europa continental.
La variante representa una "amenaza significativa" para las personas no vacunadas y para las vacunadas con comorbilidades y/o mayores cuya respuesta inmunológica es inferior. El virus no se transmite por superficies situadas en el exterior y lo hace a través del aire espirado, así que es momento de volver a las mascarillas, que son capaces de reducir hasta un 90% de los contagios si las llevamos todos. Sin embargo, la situación actual en nuestro país es preocupante. Mientras que algunas CCAA han solicitado medidas restrictivas a escala nacional para frenar el avance de la variante Delta, ya que no tienen herramientas para poder frenar los contagios, en otras, se ha apostado por salvar la economía frente a la salud, mientras que la tasa de positividad de las pruebas PCR, las hospitalizaciones y los ingresos en las unidades de cuidados intensivos presentan un ascenso vertiginoso.
Los informes que tenemos acerca de las vacunas respecto a la variante Delta también son algo inquietantes, pues las vacunas son altamente efectivas pero no perfectas. De hecho, la protección de infección no llega al 40% con una dosis y con dos dosis, llega al 60% con la vacuna de Astrazeneca y a un 88% con la de Pfizer, aunque previenen las hospitalizaciones en un 95%. Y lo preocupante es que al 40% de la población del grupo 60-69 años le falta la segunda dosis y el 25% de aquellos entre 40 y 49 años, aún no han recibido la primera dosis.
Por eso, en zonas con alta densidad del virus, tenemos aún que inmunizarnos muchos más para poder preservar la economía este verano. Así que corran de nuevo a ponerse la mascarilla cuando estén en contacto con acúmulo de personas, especialmente los jóvenes que ya están entrando en las unidades de cuidados intensivos y no se confíen, porque los pronósticos para los próximos meses son muy preocupantes.