Ecografía del Vaciamiento Gástrico
Las alteraciones del tránsito intestinal y vaciado gástrico generan múltiples síntomas que afectan negativamente a la calidad de vida de los pacientes, como náuseas, sensación de plenitud precoz, vómitos... Este tipo de alteraciones puede afectar hasta a un tercio de la población, consumiendo muchos recursos sanitarios [1]. Asimismo, el vaciamiento gástrico enlentecido, o gastroparesia, es una complicación de algunas patologías frecuentes en el campo de la Nefrología, como la diabetes mellitus, la amiloidosis y la enfermedad renal crónica, llegando en algunos casos a afectar hasta al 60% de los pacientes con dichas enfermedades [2]. La constancia de un vaciamiento gástrico completo permite un diagnóstico diferencial básico para iniciar un tratamiento dirigido y es necesario, e incluso imprescindible, en circunstancias de vital relevancia como las intervenciones quirúrgicas (Tabla 1) [3].
Existen varios métodos diagnósticos utilizables para el diagnóstico de las alteraciones de vaciado gástrico, como la gammagrafía de vaciado gástrico, el test del aliento o la cápsula de motilidad, siendo de mayor costo y no disponibles en muchos entornos [2]. La ecografía abdominal nos permite estudiar la función motora del estómago con relativa sencillez, de una forma rápida, barata e inocua [4]. El estudio de imagen del vaciamiento gástrico mediante ultrasonidos se introdujo en la década de los años 80 del siglo pasado, principalmente en el estudio de la dispepsia [1] [2].
APARATAJE
Necesitamos un equipo de ultrasonidos con modo bidimensional y una sonda convex de 3,5-5 mHz (baja frecuencia) que permita visualizar planos profundos, siendo deseable disponer de modo Doppler por si fuera necesario medir el flujo transpilórico.
ANATOMÍA ECOGRÁFICA DEL ESTÓMAGO
El estómago es un órgano hueco cuya ecoestructura difiere dependiendo de si se encuentra vacío o lleno. Mediante ecografía, el antro se localiza tras identificar el lóbulo superior izquierdo del hígado, los principales vasos sanguíneos abdominales (la aorta abdominal y la arteria mesentérica superior) y el páncreas (Figura 1).
Tenemos que valorar:
- Paredes del estómago: Han de ser lisas, delgadas y homogéneas.
- Contenido: Si el contenido es líquido se verá anecoico en la ecografía, es el caso del agua y el jugo gástrico. Si el contenido es más denso (por ejemplo, leche) se verá hiperecoico y, por último, si el contenido es sólido la imagen será heterogénea. Un caso interesante es la “imagen en cielo estrellado” que ofrece el interior del estómago tras la ingesta de bebidas carbonatadas.
- Peristalsis: Observaremos las contracciones de las paredes gástricas enviando el contenido hacia el intestino delgado a través del píloro (Figura 2).
COLOCACIÓN DEL PACIENTE
Decúbito supino: Comenzaremos la exploración colocando la sonda longitudinalmente en posición subxifoidea. Si el estómago tiene contenido, haremos las medidas de los diámetros anteroposterior y transverso para calcular el área transversal (Figura 3). En caso de que el estómago no presente contenido, colocaremos al paciente en decúbito lateral derecho.
Decúbito lateral derecho: Mediante esta proyección detectaremos pequeños contenidos de la cámara gástrica no visibles en decúbito supino a nivel antral.
Por tanto, para asegurar que no existe contenido gástrico siempre se debe explorar al paciente en ambas posiciones.
Se distinguen 3 grados de llenado del estómago [5]:
Grado 0: sin contenido líquido ni en decúbito supino ni lateral derecho.
Grado 1: contenido sólo en decúbito lateral derecho.
Grado 2: con contenido líquido en decúbito supino y lateral derecho.
El grado 1 se considera de riesgo bajo de aspiración y, si el contenido en inferior a 1,5 ml/kg, se considera que el paciente ha hecho el ayuno de forma adecuada. Aquellos pacientes con un grado 2 de llenado son considerados de alto riesgo de aspiración.
CÁLCULO DEL VOLUMEN LÍQUIDO GÁSTRICO
Se hará con el paciente en decúbito lateral derecho y en un momento en que no haya movimientos peristálticos en el estómago [6].
La fórmula para el cálculo del volumen de líquido intragástrico es la siguiente:
Volumen gástrico (mL) = 27.0 + (14.6 × CSA del antro) - (1.28 × edad)
El CSA es el área de la sección transversal del antro medida en cm2. Podemos medirlo automáticamente con el ecógrafo o mediante la siguiente fórmula [7]:
CSA (cm²) = (diámetro anteroposterior × diámetro cráneo caudal × π)/4
ECOGRAFÍA FUNCIONAL: CÁLCULO DE LA TASA DE VACIAMIENTO GÁSTRICO (GER)
Para ello se le administra al paciente una dieta standard semilíquida y se hace la ecografía tras ayuno de 12 h (T0); inmediatamente después de beber la comida semilíquida de prueba semilíquida (T1); y a los 30 (T30), 60 (T60), 90 (T90) y 120 (T120) minutos después de consumir la comida semilíquida de prueba.
El GER se calculó como:
(CSA en T1 - CSA en T30/T60/T90/T120)/(CSA en T1 – CSA en T0)] × 100 (%). × 100 (%).
Sin ser tan exhaustivos y, desde un punto de vista práctico, se pueden hacer mediciones del volumen gástrico total postprandial midiendo el diámetro del antro gástrico (anteroposterior y longitudinal) a los 15 y 90 minutos post-ingesta. Las medidas se realizarán cuando no haya contracción gástrica como hemos dicho. En sujetos sanos, el valor medio de reducción de la cámara gástrica a los 90 min postingesta es del 60% frente al 29% en diabéticos (Figura 4).
Conclusión
La valoración mediante ecografía a pie de cama (PoCUS) del contenido de la cámara gástrica y de su vaciamiento (ecografía funcional) es de gran utilidad para confirmar el ayuno correcto de los pacientes, así como para evidenciar la existencia de gastroparesia en aquellos pacientes renales y/o diabéticos con síntomas sugestivos. Resulta una técnica de bajo coste, inocua y reproducible que puede ayudar al nefrólogo a orientar el diagnóstico en pacientes con alteraciones de tránsito, apetito y plenitud, planificando así un tratamiento dirigido.